10 abril 2011

Empezamos con los cereales

¿YA? Pues sí, la pediatra ya nos ha mandado cereales para la merienda.
La historia es larga. Primero resultó que como Pedro tenía caquitas líquidas y por las tardes a última hora cogía 'mosqueos' importantes podía ser que tuviese intolerancia a las proteínas de la leche de vaca. ¿El resultado? Yo, que soy su madre y le alimento, sin probar nada proveniente de la vaca durante dos semanas  para poder comprobarlo. Eso supone no tomar leche, no tomar quesos (ni siquiera de oveja o de cabra!), no tomar ningún tipo de bollería, mantequillas, galletas, postres preparados, comidas preparadas, ni tampoco carne de ternera.
Pasadas las dos semanas hubo pequeñas mejoras, y por ello seguimos con esta dieta hasta el destete. Pero como los lloros persistían nos indicó que podía ser que tuviese más hambre. De ahí las papillas de cereales, eso sí, con agua mineral que con leche no puede...pobret!
El primer día que le dimos la papilla se convirtió en un experto comedor. Al principio le costó y la echaba para fuera porque intentaba mamar, pero al cabo de poco él mismo intentaba agarrar la cuchara y abría la boca al acercársela. Además, pone cara de concentración al comer, una carita más graciosa!
Aunque ahora el tema es otro, porque desde que toma la papilla llora y toma más por las noches! ¿Por qué? ¿No se supone que está más alimentado y tendría que tener menos hambre? Eso pensaba yo, pero va a ser que no. Mi teoría es que las papillas le han abierto el apetito y ahora sí que la hemos liado!

2 comentarios:

  1. q mono!!! una semana y lo podremos ver por nosotros mismos!! ajajajj ;)

    ResponderEliminar
  2. jajajjajaj es guapísimo!! y como ya hemos visto sabe perfectamente quien es su tita Tere :P

    ResponderEliminar

¡Gracias por tus comentarios!